La enseñanza de Epicteto, filósofo estoico, subraya la importancia de que nuestras acciones reflejen lo que decimos. Esta idea, fundamental en la filosofía estoica, nos invita a vivir con integridad y coherencia. A continuación, analizaremos más a fondo esta enseñanza y algunas estrategias que podemos implementar para alinear nuestras palabras y acciones, viviendo según nuestros principios y valores.
1. La Importancia de la Coherencia
Epicteto nos enseña que las palabras, sin acciones que las respalden, pierden su valor. No basta con hablar sobre virtudes o ideales, sino que debemos encarnarlos en nuestra vida diaria. Vivir de acuerdo con lo que decimos no solo fortalece nuestra credibilidad, sino que también nos permite vivir con mayor paz interior. Cuando existe coherencia entre lo que pensamos, decimos y hacemos, nuestra vida se vuelve más auténtica y significativa.
2. Evitar la Hipocresía
La hipocresía surge cuando nuestras palabras no se corresponden con nuestras acciones. Es fácil caer en la trampa de decir lo correcto o lo que se espera socialmente, pero actuar de manera contraria. Epicteto nos insta a tener cuidado con esta disonancia, ya que no solo perjudica nuestra reputación, sino que también erosiona nuestra integridad personal. Para evitar la hipocresía, es crucial practicar la autoevaluación constante y ser honestos con nosotros mismos.
3. Vivir Según los Principios
Uno de los mensajes centrales de Epicteto es que debemos vivir según nuestros principios, no según lo que otros esperan de nosotros. En lugar de buscar aprobación externa, debemos guiar nuestras acciones por nuestras convicciones y valores internos. Esto implica una reflexión profunda sobre cuáles son nuestros principios fundamentales y cómo podemos aplicarlos en cada aspecto de nuestra vida. Al actuar desde esta base, nuestras palabras tendrán mayor peso y nuestras acciones serán una verdadera expresión de lo que creemos.
4. Estrategias para la Coherencia Personal
Para poner en práctica la enseñanza de Epicteto, hay varias estrategias que podemos adoptar:
• Autoevaluación regular: Reflexionar sobre si nuestras acciones reflejan lo que decimos o creemos. Esto puede hacerse a través de la escritura en un diario, la meditación o el diálogo interno.
• Establecer metas realistas: Es importante que nuestras metas y principios sean alcanzables. A veces, decimos cosas que no son posibles de realizar en nuestra situación actual, lo que puede crear incoherencias.
• Rodearnos de personas alineadas con nuestros valores: El entorno tiene un gran impacto en nuestra conducta. Al rodearnos de personas que valoran la coherencia y la integridad, es más probable que mantengamos nuestros principios en la práctica diaria.
5. Enseñanza Estoica: Control de lo que Depende de Nosotros
La filosofía estoica nos recuerda que solo podemos controlar nuestras acciones y actitudes, no el comportamiento de los demás ni las circunstancias externas. Por lo tanto, para vivir de manera coherente, debemos centrar nuestra energía en lo que depende de nosotros. Si hacemos esto, nuestras palabras y acciones estarán alineadas, independientemente de las influencias externas.
La lección de Epicteto sobre la coherencia entre palabras y acciones nos invita a vivir de manera más auténtica y a evitar la hipocresía. Al hacerlo, no solo cultivamos la confianza de los demás, sino que también fortalecemos nuestra propia integridad y bienestar interior. Aplicar esta enseñanza requiere una autoevaluación constante, la adherencia a nuestros principios y el compromiso de vivir según nuestras convicciones más profundas.
